Queridos Reyes Magos.
Este año he sido trabajadora, generosa, estudiosa y buena, aunque podía haber sido un poquito mejor.
Me gustaría que a papá le trajerais una corbata y un libro, a poder ser de humor. A mamá le gustaría un perfume y un broche para el abrigo.
¡Os recuerdo! Que en casi sesenta años, nunca me habéis fallado, así que os pido que me cambiéis a Pepe por un Ronaldo o un Messi de 17 o 18 años. Pepe está para pocos trotes y se ha ganado una digna jubilación en el campo. El color de la capa del caballo que me vais a traer, me da igual, la que vosotros elijáis me gustará.
Queridos Melchor, Gaspar y Baltasar, comprendo que la crisis afecte a vuestra magia, pero como podéis ver, Doña crisis nunca podrá con la ilusión.
Gracias por los regalos que nos vais a traer.
María Teresita.
P.D. Para los camellos os dejaré: heno, zanahorias y pienso del que le ponen a Pepe, para vosotros unos canapés y unas copitas del fraile Don Perignon.