Hoy es

Plumas y Tablas & EnR



       Programa de actos a realizar en Madrid, en los días 3,4,5 y 6 de Abril de 2017, con motivo de la visita cultural que nos hace el Centro Plumas y Tablas de Arica (Chile).




03 abril 2017

10:00 a 13:00   
Taller del libro artesanal
Casa Castilla-La Mancha C/Paz 4 1º dcha

18:00 a 19:30
Visita al Taller de Poesía de Enrique Gracia
Café Ruiz, Calle Ruiz 11

20,30 a 21:30
Visita al Café Gijón.
Café Gijón, Paseo Recoletos 21



04 abril 2017

10:00 a 13:00   
Taller del libro artesanal
Casa Castilla-La Mancha C/Paz 4 1º dcha

13:30 a 14:30
Visita guiada al Ateneo de Madrid
Lugar Ateneo de Madrid, Prado 22

18:00 a 20:00
Recital poético EnR & Plumas y Tablas
Micrófono abierto a todo el que quiera participar.
La Trocha. Calle de Huertas 55


05 abril 2017

10:00 a 13:00   
Taller del libro artesanal
Casa Castilla-La Mancha C/Paz 4 1º dcha

18:00 a 20:30
Entrevista a autores chilenos en Radio Círculo…
Visita Taller de Poesía del Círculo
Círculo de Bellas Artes. Calle Alcalá 43


06 abril 2017

10:00 a 13:00   
Taller del libro artesanal
Casa Castilla-La Mancha C/Paz 4 1º dcha

19:00 a 20:30
Presentación de antologías:
Antología Anual EnR 2016
Antología Binacional “Chile/España-España-Chile”
Micrófono abierto a los socios de 
EnR & Centro Plumas y Tablas
El acto se desarrollará en el Salón de Actos de la 
Asociación de Escritores y Artista Españoles
C/Leganitos, 10 1º dcha.










Tren de Invierno


...de Google
                         
                        El silbato del tren que suena a lo lejos
                        viene cargado de notas de melancolía
                        cada paso de rueda por el raíl
                        cada roce de manos sobre las teclas
                        ¿Qué ruedas, qué teclas, qué tren,
                        qué manos serán?


                        El invierno ha nacido ahora mismo
                        y se anuncia un duro y prolongado frio
                        que dice el parte de noticias
                        traerá mucha nieve al corazón
                        ¿Qué nieve, que frío, qué almas
                        lo sufrirán?

                        Pon tus manos junto a las mías
                        y corramos a través de las calles heladas
                        pues así podremos calentarnos
                        y no nos sentiremos nunca solos
                        ¿Por qué tú, por qué yo, por qué nosotros
                        somos los protagonistas?

                        Quién puede afirmar lo contrario
                        cuando el silbato del tren suena a lo lejos
                        cargado de notas de melancolía
                        porque el invierno por fin ha llegado
                        ¿Qué manos, qué nieve, qué frío,
                        qué corazones lo sentirán?

No puedo resistir

de google
     Las horas ingratas pintan versos estúpidos en la blancura imperfecta de mi alma, cansada de vagar entre tantos sueños caóticos que, al final, huyen por caminos perdidos en un tiempo difuso. Me dejo llevar por tópicos eternos que me introducen en paraísos luminosos donde pierdo mi propia identidad entre borrachas imágenes que acaban con mis sentimientos más inocentes.
     Las palabras ausentes acuden a mi ayuda, procuran arrancarme de las garras de la soledad, del egoísmo de viejos complejos y temores absurdos. Los rotundos ecos de su voz conmueven a mis silencios, incapaces de seguir gritando, hartos de escuchar las excusas de siempre, las justificaciones repetidas a lo largo de tantas madrugadas. Me ofrecen estrofas luminosas que fingen entregar toda su pasión, pero son incapaces dibujar los versos sencillos, transparentes, de mi alma. 
     No puedo resistir tanta desdicha, el dolor es insoportable. Escapo del sopor del atardecer, huyo entre sueños apagados que me llevan hacia un destino incierto donde, tal vez, pueda ser feliz. En eso confío cuando el amanecer me entrega, cada jornada, esperanzas nuevas, repletas de ilusiones, poemas por hacer que aguardan mis ardientes lágrimas, las estrellas fugaces inunda de una extraña dicha mi corazón cansado de buscarla, mas sólo encuentro reproches de atardeceres rencorosos que me impide contemplar el horizonte en toda su plenitud.
     Tal vez en algún recodo del camino me esté aguardando. Espero que no sea demasiado tarde y pueda escribir mi último verso sobre las hojas secas de un otoño compartido.

Mi roble y yo

... de Google
       Durante años he ido a caminar a un bosque maravilloso donde los colores, cantos y olores cambian según las estaciones. Bosque inmenso, de altos árboles y vistas al infinito, donde las montañas de los Pirineos se divisan a lo lejos.
       En un pequeño y escondido camino conocí a un roble, árbol grandioso y hermoso, anclado a la tierra y cuyas ramas se elevaban al cielo y me daban cobijo; me sentaba en su base y me apoyaba contra su tronco firme y sólido, dejándome arrullar por la suave melodía del viento jugando con las hojas.
       Una tarde, al despedirme como todos los días, oí: “Hola, ¿cómo estás?
       Me volví a ver si había alguien más en ese lugar, pero solo estábamos mi roble y yo.
       “No te asustes, no debes tener miedo, soy el árbol en el que te apoyas y reflexionas. Hace mucho tiempo que te siento, vienes a pasear y a pensar; te sientas y sientes mi fuerza que te da alas para elevar pensamientos en una danza de amor sin tiempo ni espacio para alimentar tu alma y poder volver a bailar la danza de la vida en cada instante mientras caminas.
       Te gusta pasear por el bosque, sentir su fuerza y su paz, en momentos de reflexión previos a tomar una decisión, hablas con las fuerzas de la naturaleza, contándole tus miedos y temores por lo desconocido pero sabiendo que lo correcto es un camino certero y aunque lo desconozcas sabes que irás a buen puerto. Esos miedos y temores se diluyen en el consuelo de la serenidad que nace en la profundidad del alma donde reina el sol de la mañana.
       Buscas la armonía entre olorosas flores, colores y belleza que solo la paz del bosque te aporta y que te ayuda a avanzar y a crecer; sientes el aire como un mensajero espiritual que te dice que el conocimiento debe transmitirse para que cobre vida y pueda así formar parte de otras personas. Hay que luchar por los sueños y realizarlos para transformarlos en acciones para que no sean puras quimeras.
       Hay muchas personas que piensan o creen que los árboles, las plantas, las flores o los animales, es decir, todo lo que no es humano, ni sienten ni padecen porque creen que no tienen alma pero se equivocan, todos tenemos alma y es, esa alma inmortal la que nos hace ayudar a los demás, de cualquier especie y en cualquier lugar.
       Hay muchos incrédulos que no respetan el medio donde viven matando a la Madre Naturaleza y guiando a la Humanidad a un desastre sin igual. Son mentes torpes y obtusas que creen que pueden vencer a la Madre Naturaleza; es de ignorantes pensar que la Madre Naturaleza puede ser vencida por egos sin medidas. Hay que ser humildes ante la grandeza de la obra divina, la Naturaleza.
       Los seres humanos sois efímeros con una vida en el tiempo muy corta, en cambio, la Naturaleza se regenera continuamente, cumpliendo sus ciclos para protegeros y daros cobijo. La Madre Naturaleza pide clemencia, respeto y dignidad para todos los seres vivos. Hay que intentar que las personas sean cada día mejor, vencer a la violencia ya que avanzar es ascender y ese ascenso conduce al origen, a Dios, a la Energía Creadora, al Espíritu… Y aunque no se les ve, sí se les siente en el corazón y en el alma.
       No se puede vivir sin aire, sin agua, sin tierra, sin árboles… y no podéis seguir escuchando a la ignorancia ya que solo trae violencia, es hora de crear un mundo mejor donde reine la paz y el amor. Los seres humanos deben abrir sus corazones y elevar sus almas para que el amor, en todas sus manifestaciones, pueda tocar las fibras sensibles de cada uno y puedan oír la dulce y armoniosa música de las esferas.”
       Hemos traspasado numerosas puertas y por esto llevamos la huella en nuestra alma; la pregunta: ¿hacia dónde vamos? Debemos responderla con sinceridad, tal vez sepamos la respuesta o tal vez la ignoremos, pero la pregunta debe estar viva para que queme nuestra alma así como su respuesta debe ser viva para poder integrarla.
       Con gran respeto transmito el mensaje de un árbol, preocupado por el bienestar de la Humanidad para que tomemos consciencia de que el planeta es nuestra casa y de que no se puede vivir ni sobrevivir sin las fuerzas de la Naturaleza. El cuerpo humano no puede caminar sin aire, no puede vivir sin agua, no puede comer si no hay tierra… en definitiva, no podemos vivir sin la Naturaleza.



¿Pecado?













¡Es un pecado no verte...
y es pecado no tocarte!
Es pecado el desenfreno 
que me provoca tu amor,
y voy loca de deseo
y estoy loca de pasión,
y no sé si ya tus besos
aceleran mi castigo,
pero prefiero estar muerta
que dejar de estar contigo!

Tengo sed

... de Google
No les queda polvo a tus sandalias
heridas  por la nieve.

Atrás, se va quedando
la sombra de tu sombra,
mientras luce el interior de tu castillo
el esplendor de tus moradas.

Mujer de las vanguardias,
yo te miro,
y quiero retenerte entre mis horas
pues mis manos se acostumbran a tu fe,
y me alejo de la orilla del abismo,

Incrédulo de mí, 
siento a cada paso
como va creciendo tu cosecha
pues mis ojos se despiertan con tu luz
que derrota la noche, y el dolor.

Porque veo entre tanto oscuro
la claridad de tu palabra
te mantengo en el recuerdo
desde siempre, 
Pues no es tierra de Castilla la que olvida,
ese silencio de tu Dios en el camino.

Tengo sed,
esa sed que me atormenta,
Esa sed que no  se agota,
Esa sed
que me envuelve en el dolor y me sostiene
sed de amor,
esa sed que me deja rota el alma
y que me mata


Esa sed de tus moradas






XXI PREMIO DE POESÍA SANTA TERESA DE JESÚS 
DEL  HOGAR DE ÁVILA  EN MADRID  2017
FORMA PARTE DEL POEMARIO
INEDITO Y HOMONIMO DE ESTE AUTOR.

Confesiones de un amante

...de Google
                                              
                   Hay silencios
                   que sólo son vacías mañanas
                   madrugadas en mi cama
                   aguardando la llegada
                   de tu dulce corazón
                   rompiendo el tiempo y la distancia
                   matando las nubes grises de tus besos
                   dándoles alas a mis manos doloridas


                   Hay mañanas
                   que están hechas de silencios
                   negros vientos de la noche
                   que atrapan mi alma soñadora
                   entre los fríos e hieráticos cristales
                   de un millón de pálidas ventanas
                   allí donde los ágiles y maléficos relámpagos
                   entierran su ardiente luz bajo mi almohada

                   Hay mañanas y silencios
                   silencios y mañanas que velan alboradas
                   a la espera de que nazca un nuevo día
                   ese que hoy ya sé que nunca llegará
 






Asamblea de socios, sábado 25 de marzo

Un momento de la reunión en la Sala de Juntas

Levantar la última copa de amor

... de google
       Quisiera conversar lentamente con la madrugada, poder repasar con tranquilidad todas las emociones degustadas a lo largo de la jornada, cada vez cuesta más subir las escaleras de la vida sin hacer un descanso en la nostalgia, con un recuerdo es suficiente para continuar la ascensión donde las estrellas aguardan, impacientes, para entregarnos los pasos a seguir, al mañana le gusta jugar a la improvisación más absoluta, nuestro parecer no interesa, únicamente hemos de acelerar la marcha para poder sonreír en alguna esquina escondida del tiempo. De vez en cuando hay que hacer un leve descanso y tratar de dibujar un verso, un mísero verso donde poder anotar la temperatura de la última emoción o el grado de acidez del último correo recibido a destiempo.
       Cada vez cuesta más avanzar por una senda que se niega a reconocer la pisada de nuestras huellas, que no acepta la tardanza injustificada de los sueños inmaduros ni las rabietas de los relojes que no encuentran la rima traviesa de un poema equivocado, dolorido por la cantidad de asonancias que se ocultan en los rincones perdidos de casa amanecer.
       Cuando la jornada finaliza hay que huir de tanta apatía y despojarnos del polvo de la jornada, ponernos las zapatillas preferidas, dispuestos a recorrer los recovecos secretos de la madrugada, siempre nos espera con su mejor sonrisa y la última copa de amor.

EnR en Canal 33


Ésta es la grabación que Canal 33 hizo en la 
Librería Libros de Arena
con motivo del Día de la Poesía
en la que estábamos algunos socios de EnR
para promocionar nuestra asociación.
Que lo disfrutéis.

La música del Corazón (Bao: El monje lego)

... de Google
       Bao, un monje lego recién llegado al monasterio colgante de Datong, preguntó a su maestro Chang:
       — Maestro: ¿por qué estoy algunas veces triste y otras alegre?    
       — Hijo mío, eso es porque no has afinado el instrumento del corazón.
       — No lo entiendo, Maestro Chang. ¿Acaso dentro del corazón puede habitar la música?
       — Cierto. El Mundo lleva dentro de sí armonía y desarmonía y nosotros igualmente, al ser partes de él. ¿Pero cómo saberlo cuando somos tan ignorantes? Vivimos sin pensar en que vivimos y eso no es bueno, pues de dicha ignorancia nace la desarmonía, esa que tú a veces sientes.
       — Maestro: a mí me parece todo eso un pensamiento demasiado confuso.
       — Ya te diré, Bao, como habrás de aclararlo. Pero primero vayamos a la fuente del problema: el instrumento con el que es posible interpretar la música del Mundo, pues sabido es que el Universo está hecho de música que podamos tocar haciendo vibrar las cuerdas de nuestro corazón.
       — No siento yo que mi corazón tenga cuerdas por dentro.
       — Pues las tiene, lego Bao. Son sutiles, pero aún así puedes tocarlas.
       — ¿Con las manos Maestro, supongo que no?
       — Desde luego que no; en eso aciertas, monje. Que dentro del corazón no hay cuerdas que vibren, más aún así, éste es capaz de vibrar.
       — Querido Maestro Chang: mi confusión no sólo disminuye, sino que al contrario va en aumento.
       — Paciencia, lego mío, que andando se llega al final del camino; que si el camino tiene un inicio, seguro habrá de tener también un final.
       — En ello estoy, Maestro, pues quiero saberlo todo.
       — En eso no llevas razón, monje Bao, que ni yo mismo conozco ese Todo al que te refieres. Pero prosigamos. Atiéndeme, lego. Los instrumentos y la música que con ellos se interpreta no fueron hechos para emocionar al corazón, sino que todos ellos no son más que un pálido reflejo de las notas que éste les otorga y por el cual cobran vida; pues de no existir la música del Corazón ninguno de ellos habría visto nunca la luz.
       — Ahora, Maestro Chang, mi perplejidad aumenta más, aunque empiezo a ver algo de claridad a lo lejos.
       — Lo sé bien, lego, pues pronto llegarás al final de ese camino del que te hablado y podrás obtener la respuesta que buscas. Escúchame con atención. Cada instrumento de cuerda  — tomemos, por ejemplo, uno como el yangqin— consta de una base que es su caja de resonancia y sobre ella se extienden las cuerdas metálicas de distintas longitudes, que vibran y entregan diferentes notas al ser accionadas por las manos del músico.
       — Cierto, Maestro, lo he visto hacer. ¿Pero qué tiene eso que ver con mi corazón?
       — ¡Ay, incrédulo monje lego! Aún no has llegado al final del camino y sigues dudando de mis palabras.
       — Maestro Chang, yo sólo quería decir...
       — La ignorancia te ciega. Lo tienes dentro de ti mismo y no lo sientes.
       — El corazón del ser humano es el instrumento más delicado de todos cuantos existen. Y sí, tiene su caja de resonancia que mueve al cuerpo entero y sus cuerdas hechas de sutiles emociones, cuyas notas son los sentimientos, pueden entonar tristes o alegres melodías, todo depende de la mente de la persona que las toca: el músico quien compone e interpreta la melodía.
       — Ahora comprendo por fin, Maestro Chang, por qué a veces estoy triste y otras alegre.
       — Pues te diré algo más, monje Bao. Para que tan bello y delicado instrumento suene bien es preciso que sea afinado con devoción y empeño, y eso sólo puede lograrse cuando nuestra mente se halla en silencio. Justo ahí, en el silencio de esa maravillosa caja de resonancia, yace la música del Corazón: una música que ya no es música, un sonido carente de sonido, la huella del vacío que todo lo inunda.
       — Gracias, Maestro Chang, por haberme dado ese conocimiento; ya que ahora que no entiendo nada, Todo lo entiendo.
       — Así de simple en su complejidad —contesta finalmente el Maestro— es el camino de la Iluminación, que si somos constantes en su búsqueda, ya jamás nos abandonará.




Conciencias dormidas

foto google, mente maravillosa
    Conciencias dormidas, conciencias en hibernación que permanecen sin tomar responsabilidades de sus acciones, ni son conscientes de lo que pasa dentro de ellos mismos ni de su alrededor. Conciencias dormidas que viven en un mundo cerrado de ilusión, en un sectarismo que no permite dar cabida a otra alma diferente que no pertenezca a su círculo. Sectarismo de una ilusión que crea mucho padecimiento a su alrededor pero que se desvanecerá con un soplido de huracán.
       Muchas conciencias viven en un letargo que paraliza sus sentidos deformados por una ilusión inexistente, creyendo que su irreal mundo es inalcanzable para los simples mortales y que a ellos nada les puede tocar porque se encuentran escondidos en su torre de cristal. Organizan, ordenan y mandan sobre la vida de otras personas, gritan sus deseos que deben ser ejecutados al instante, no importa el medio a utilizar, siempre y cuando sus deseos sean cumplidos. El resto de los humanos son muñecos de cerámica que cuando los tiran al suelo se rompen en mil pedazos.
       Esos muñecos de cerámicas que tienen alma y conciencia se sienten cansados de tantos abusos e injusticias, se sienten asqueados y hartos de sufrir la ignorancia y el desprecio que sobre ellos vierten algunos de los ficticios amos y señores de ciertos países.
    A esas conciencias dormidas profundamente, -que no oyen el clamor de los seres humanos, que no son capaces de sentir el sufrimiento que desgarra el aire,…- habrá que despertarlas, para decirles que deben aprender lo que ignoran o tienen que aprender lo que no desean aprender. Profundo letargo el suyo pero el mundo está cambiando y las huestes de la Humanidad se levantan en un canto a la igualdad, al respeto, a la justicia, a la libertad y a la unidad, bastiones del nuevo mundo que no por ser nuevo es utópico.
      Muchas veces vemos a los Dioses como si fueran inalcanzables y no realidades y esas conciencias dormidas se creen o pretenden que están en la misma clasificación que Ellos, pero se equivocan, los dormidos pertenecen a la clasificación de dioses de barro que al igual que los muñecos de cerámica, si los tiran o se caen se rompen en mil pedazos porque todos somos seres humanos. En el mundo de las ilusiones de las conciencias dormidas, los demonios suelen ser la codicia, la intransigencia, el egoísmo y la vanidad; poderosos demonios que debemos evitar, pero las conciencias que hibernan están muy apegadas a sus ilusiones o errores.
     La opresión, cadena a la que millones de seres humanos están sujetos, es inhumana e indecente;  ésta cadena es una prisión de sus propias ataduras debido al terror, a la angustia y al sufrimiento que padecen, pero, se van a liberar porque la fuerza y el deseo de avanzar, de vencer a su sufrimiento, de luchar por su dignidad, por su libertad es mil veces más fuerte que cualquier cadena por muy gruesa que sea.
Estas personas que luchan por su libertad avanzan poco a poco pero van sobre seguro ya que su fuerza emerge de  su interior y del deseo de respeto por crear un mundo mejor. Los dormidos solo duermen su sueño ilusorio y no se percatan de que el tiempo de hibernación ha pasado y que la primavera ha eclosionado en colores y en sol.
    El bien y el amor de los luchadores son los estandartes de los impulsos nobles de millones de corazones que laten como si fueran uno solo, al ritmo del tambor, pom-pom-pom, en una danza de alegría para romper las ataduras de la esclavitud sometida por los que tienen adormecida su conciencia, que crean lugares sombríos y húmedos llenos de moho y miseria.
     El canto y las armas, de esos nobles corazones que cantan a la libertad, son las palabras no la violencia, palabras que forman un canto de alegría, de dignidad, de respeto, de justicia contra la desigualdad, la injusticia y la irrespetuosidad que esas conciencias dormidas castigan sin parar en un implacable y continuo ataque sin piedad.
     Ha sonado el gong, y el temor se va disipando como la niebla, y las huestes sometidas de la Humanidad han empezado su grandiosa marcha que no dejará impasible a ningún ser humano porque su canto se cuela a través de la piel hasta impregnar todas las células de nuestros cuerpos y de la naturaleza. Los nobles impulsos del ser humano, el amor y el bien, caminan sin parar en esta marcha que no dejará ya de avanzar.

Sonidos en la memoria



       El martes 21 de marzo se celebró en todo el mundo el Día Mundial del Síndrome de Down, la fecha más señalada del año para este colectivo. Para conmemorarlo, os propongo que leáis el capítulo 55 de mi libro Horizonte al noroeste publicado por Vitruvio en el año 2011, Sus cincuenta y siete foto relatos tienen nombre propio.
       Cincuenta años después las personas que de niño marcaron mi vida, siguen teniendo nombre propio.
       José Manuel Nuez Barreiros, gallego, hijo de guardia civil, no tuvo hermanos. Tenía el síndrome de Down Lo supe mucho después, pero este es mi homenaje.


Sonidos en la memoria

"Tiene la cara redonda y unos ojos buscadores de luz.
Le gusta correr por la carretera guiando una llanta de bicicleta con un gancho de hierro, haciendo un ruido infernal. Es el juego del aro.
A veces yo le sigo con otro igual, compitiendo, para ver cuál de los dos suena más fuerte.
Siento por él un cariño especial, imperecedero. Es más que mi amigo.
Años después descubro que aquella mirada, aquella cara tan redonda, es propia de las personas que padecen síndrome de Down."




Rimas para supervivientes



Muy pronto en librerías estas
Rimas para supervivientes
de
Gio Aguiló

Tarde en la dehesa


... de Google

            ¡Cómo se mece el aire fresco del campo al atardecer! Bajo la parda encina, brilla el alcotán en su vuelo raso y se empluma decorosa la inquieta abubilla. Todo el bosque de la dehesa respira vida, y yo, espectador extasiado, me dejo acariciar por su inalcanzable magia mientras alzo la mirada arrebatada hacia el azul del cielo.
            A lo lejos, en el brumoso horizonte, la sierra mineral dibuja su perfil tallado por multitud de escalonados altozanos; sueña su alma grande sumergida en la maleza salvaje y vegetal. Poco a poco, voy sintiendo el húmedo calar de mis huesos por el paso lento de las horas que amartillan el verde rabioso de las hojas. Todo es abundancia regalada por la madre naturaleza; que respira y respira dulcemente y me habla queda en el silencio; que escoge un pequeño hueco en mi corazón y se me adormece dentro.





Poesía

... de Google.


Palabras que forman frases
bailan o vagan a través del aire,
juegan con el viento y acarician a
las personas que recogen sus mensajes.

Mensajes de sentimientos y de buena voluntad,
que nos dan una nueva percepción
de la vida con su  poesía que acaricia el alma
de los que dan esperanza y hacen
que el mundo sea una realidad mágica.

Poesía que comparte sentimientos,
sensaciones de penas y alegrías;
Poesía que nos inspira canciones,
y, nos enseña a buscar soluciones
para avanzar por la vía de la vida,
alzando su voz con pasión y satisfacción
cantando al unísono y con acordes
“La vida es para vivir y aprender a ser feliz.”

Poesía, maravilloso instrumento
que nos hace reflexionar sobre:
¿Qué es lo correcto o lo incorrecto?
Poesía que habla de profundas emociones
y profundos sentimientos vividos o huérfanos.

Poesía de palabras que bailan con el viento,
y, cielos claros asoman en el universo
formado por estrellas, cometas y agujeros negros,
y, nos hacen sentir la grandeza del Ser que ha creado
al planeta y al ser humano  con su dignidad y pobreza.

Poesía cantada, escrita, esculturas o pinceles,
una flor, una mirada, un día, una noche,
un cielo claro o un cielo escondido entre nubarrones;
todo forma parte de ese baile
de palabras que forman la poesía.

La poesía nos ayuda a compartir los sentimientos
de amor y de terror, de besos y de puñales,
sentimientos inscritos en el alma
bajo una geometría sagrada.
Como una flor que nace o una flor pisoteada
y ambas, nos dicen que
la vida es corta para ser vilipendiada.

Todo pertenece a la poesía
porque es dicha y desdicha,
destinos que hay que vivir
para aprender a ser feliz.
Muerte, desgarro, dolor,
la poesía lo describe con amor,
profundo sentimiento del alma
al que todos conocemos
pero echamos de menos.

Hay sentimientos efímeros
y sentimientos frecuentes
que cada persona vive y siente
escribiendo su poema
como mejor le parece,
sin olvidar que la poesía
es para hacer crecer el alma,
con su luz y belleza,
para abrazar los encuentros
nn nuestros destinos:

para compartir y no olvidarla. 







A salto de mata

Pincha aquí para más información

       Me gustaría compartir contigo esta nueva obra de relatos. Te esperamos.
       Mañana, día 21 sale por fin a la luz mi segunda obra, es como mi segundo hijo. Es un hijo que viene corriendo, “A SALTO DE MATA”, nace por obra y gracia de LASTURA, pasa por un sinfín de avatares hasta llegar al océano del olvido, donde espero que no se pierda. No tiene orientación, ni derecha ni izquierda, y como ingredientes, afluentes o aperitivos os muestro la senda en este pequeño avance:



Silbar con Mozart


       ¿Te gusta esta música?
       Sí, pero ¿sabes cuál es?
       El “allegro moltto” para piano.
       ¿Te la sabes entera?
       No. Sería un genio si la supiese silbar completa.
       Yo sí.
       ¡Que dices!
       Que la sé completa.
       ¿Completa? ¿Cómo te llamas?
       María Anna Walburga Ignatia Mozart.
       ¿Cómo?
       Yo tenía dieciséis años cuando mi hermano pequeño Wolfang, compuso esa pieza. Él solo tenía once. Era un crío. 
       No pude seguir con el allegro. Un escalofrío acabó con mi inspiración musical. 
       Y ella sigue silbando hasta el compás ochenta y cuatro. 


101 Cookies


Muy pronto en librerías estas galletitas de 
Santiago Solano

Tratado de los gestos

Soledad Serrano


A Soledad Serrano
que creyó en este poema
antes que yo.







Algunos gestos son arrojadizos, están llenos de furia, listos para que el aire se ilumine y sepa la distancia, la infinita distancia miserable que separa a los hombres de la vida.
Otros son aún más rápidos, una ráfaga, un brillo, un chasquido de luz. Son para confianza de la piel, para que no se nos olvide la caricia más tenue.
Muchos parecen sin sentido pero tienen misterios en la manga, secretos incurables, decididas nostalgias, horror a la distancia que los niegue o devore. 
La mayoría de los gestos no son más que sustancia de abandono, impecable blancura, milagro inusitado, carne sola, manera de existir. 
Tened a mano siempre vuestro gesto, que lleve nombre o contraseña. No lo perdáis de vista por si os es necesario para pensar, amar, decir quién sois; para reconoceros, entregaros, ocupar vuestro puesto en la escena del mundo. 
Así reposa el índice en los labios, artesa de los besos y el silencio, así damos la espalda no entregada, la espalda en que nos vamos, dócil gesto de adiós o sígueme. 
Así se tiran dados por la mesa, con un leve desorden de las uñas, tras haberlos mimado entre los dedos: "¡Allí, allí!" cantan luego los dados. Y el gesto se hace ajeno aunque fue nuestro. 
Así se arroja el guante o la toalla, soberbio desafío o rendición, campo de hierba y sangre, cuadrilátero hermético de cuerdas, de pasión y de gritos, lugar de amor o espacio de locura. 
Así nos despedimos frotando la distancia con la mano, desafiamos al espejo con los dientes o entornamos los ojos para ver más hondo. 
Encogerse de hombros es todo un recital de ergonomía. 
Así son tantos gestos que hacen alta la vida. 
Llevar la mano al pelo y retirarlo para que no sofoque la tristeza ni oculte los deseos, mirar sin ver la hora del reloj, que puede ser la nuestra algunas veces, acurrucar los dedos sudorosos ocultos en el alma del bolsillo, mirar al fondo de metal o vidrio, cuando en el ascensor gime el silencio. 
Unos gestos ayudan, otros duelen, aquéllos dejan ácida la boca, éstos los ojos tristes, la memoria tensa. 
Los hay que alegran y los hay terribles. A veces todo al mismo tiempo, como un beso tirado en el vacío, o un dedo que se agita reclamando, riñendo, dueño de aviso siempre, amenazante o protector. 
Tender la mano a un niño, "ten cuidado", para que logre cruzar la vida o la calzada con nuestra palma en vilo y nuestro miedo. 
Humedecer los labios, ¡oh, esa alquimia que siempre alimentó el deseo! Girar el cuello a la sartén que nos reclama mientras se bate un huevo en la cocina. 
Ir pasando las páginas de un libro, sin leer, sin saber cómo; suspirar levemente cuando empieza la turbia carretera su canción, madrugado sopor, tedio, noticias. 
Puño o mano tendida, caricia o bofetada, movimiento o quietud, insinuación u olvido. 
Los gestos son lo que sujeta el mundo. 
Toser antes de hablar, quitarse un hilo de la ropa y hacer con él planetas, frotar donde las gafas estuvieron, teclear con los dedos el volante, la mesa, la rodilla impaciente. 
Comprobar el botón agonizante, devolver la mirada de reojo con oficio aprendido en antiguas películas. 
Todo mientras se afloja la corbata o devolvemos al lugar perfecto la hombrera de un vestido. 
Los gestos son sin duda lo que sujeta el mundo. 


Enrique Gracia Trinidad



De "Todo es papel" 2002 
Accésit del Premio Ciudad de Torrevieja, 2002 

Psicoanálisis

Silencio

                                 
... de Google

Nada hay que decir;
nada hay que añadir
a lo que antes se hubo dicho.


Después de que hayas recorrido
el camino previsto,
aquel que habías de recorrer,
no digas nada más a nadie,
cierra la puerta para siempre
y guarda tu casa en silencio.


El silencio es lo importante,
pues en él renacen enmudecidas
todas las voces que ya fueron dichas.





A veces


... de Google
A veces, no nos damos cuenta de
que dejamos pasar ocasiones,
Palabras, besos y caricias;
Solo cuando se comprende y se ama,
Se protege y se cuida a esas almas.


A veces, no nos damos cuenta de
Que nuestros sueños son falsos,
O, los dejamos escapar por la ventana
O por la puerta que dejamos abiertas…

A veces, no nos damos cuenta de
Que caminamos sin avanzar,
Permaneciendo paralizados
Porque nuestros pasos no quieren andar.

A veces, siento que mi alma se desgarra
Y que el aire me falta.                     
Que todo a mi alrededor es bullicio,
Que el sonido del arpa de mi alma
Se desafina porque mi alma muere
De hambre de amor y sed de esperanza.

A veces, nos damos cuenta de
Todo lo que hemos perdido
Y, ese dolor desgarrador y esa
Soledad brutal nos hacen reflexionar
Que, a veces, no nos damos cuenta de amar.

A veces, siento que hay imbatibles razones,
Que me traen los signos de los tiempos
A través de los renglones
De un libro que me ayuda
A luchar con fuerza y brío,
En ese mundo mío,
Que nace y muere en el escenario
Bajo lluvia de críticas
De personas que no comprenden
Que la libertad es vivir y amar,
Y que la música de nuestros violines
Debe ser tocada y escuchada
Por nuestra Alma inmortal.

A veces, nos toca hacer el camino
Vestidos con harapos, de los que
Todos huyen, y, a veces,
Nos toca hacer el camino
Con sedas, oros y rubíes.
A veces, pensamos que el tacto
De la seda y el fulgor de los rubíes
Son más importantes que los viejos trapos,
Olvidándonos que todos vivimos
Bajo el universo, cuyo manto
Nos arropa por igual con su luz y con su vida 
Y, nos recuerda que la Vida es digna de ser vivida
Sin importar el disfraz que separa nuestras vidas.

A veces…

A veces…