Hoy es

en la blancura impèrfecta

EN LA BLANCURA IMPERFECTA

la palabra se fortalece. 

Los versos, lentamente, 
dibujan las emociones dormidas,
perdidas en un tiempo
inexacto, 

La débil luz del horizonte
es el único motivo
para lanzarse al abismo
y recuperar los sueños
de antaño,

aquellas hermosas quimeras que,
un día lejano,
fingieron huir definitivamente.

Me engañaron. Mentían!
Siempre regresan.

Recuperan los suspiros antiguos
y siguen el resplandor de la luz 
que se difumina en un atardecer.

Hay que continuar. 

Siempre!

Los versos gritan sus pequeñas
historias cargadas de silencios
otoñales,

Las palabras, deshechas
por el frío doloroso de la ausencia,
se sumergen en la incertidumbre
más absoluta.

Desean alcanzar un horizonte nuevo.
luminoso,
donde los anhelos del ayer
vuelvan a confiar en el mañana.

un día, un lejano

UN DÍA, UN LEJANO

atardecer de un tiempo
casi olvidado
por versos cobardes
que no se atrevieron
a lanzarse al abismo blanco,

extendí todos mis sueños
sobre las profundidades
imperfectas de mi alma.

Las ilusiones, horrorizadas
por mi proceder prematuro,
completamente anormal,
huyeron por los resquicios
escondidos de mi corazón.

Aquellos versos cobardes
ignoraban la juventud risueña
de las palabras, se reían
de sus ansias de volar
por cielos desconocidos,
extraños, transparentes.

Ellas, las palabras,
poco a poco, perdieron su voz.

Tuvieron que huir
convertidas en silencios dolorosos
que no podían comprender
el porqué mi negativa a soñar
confiando en un mañana mejor.

Gritaban, sus lágrimas amargas
se perdían, desconsoladas,
en la ternura de la noche.

Mutilados

de La Red
retocada por Santiago Solano

A GUDIÑA,
AÑO 1964,
OURENSE, 
JOSE MANUEL BOCIJA FERNANDEZ
(puede estar en cualquier parte)





       Ya somos dos mutilados de la guerra del sesenta y cuatro. Tú y yo. No lo recuerdas, lo sé, porque en el sesenta y cuatro no hubo ninguna guerra.
       Sólo la nuestra.
       Cada uno tenía su territorio vigilado desde su castillo de traviesas.
       El mío al norte era más alto.
       Aquella tarde después de fabricar las bombas con carburo en las botellas de gaseosa, te invadí.
       Tú respondiste a la agresión con tus armas. Era una lata de sardinas que cortaba como un cuchillo. después de pasarla varias veces bajo las ruedas de algún tren.
       Me dejaste esa señal. tributo de combate que aún conservo en el carrillo izquierdo.
       Pero el honor era el honor, y tenia que responder. Fue al día siguiente, por la tarde, cuando quisiste visitar mis posiciones.
       Eché en la botella, agua fría de la fuente del corral, y el carburo empezó a reaccionar. Quemaba.
       Me agrediste como un valiente y respondí como un cobarde dándote un fuerte golpe con la botella en la cabeza.
       Se rompió la botella y tú sangraba, mezclándose el humo el carburo y la sangre. Todo un espectáculo dantesco.
       Llorabas. No habías muerto en el combate.
       Fue el primer paso hacia la paz.
       Luego otros pasos nos llevaron al olvido.




El micro es de
José María Garrido de la Cruz

La mansión de los ángeles

Fotografía propiedad
de la editorial



       Acabo de leer este libro de nuestro socio Raúl Morales Góngora y sólo puedo deciros que tenéis que leerlo, que está muy bien escrito, con una sencillez que es la excelencia misma; y sobre todo con unos contenidos que tocan la fibra del mejor lector. Sólo os transcribo aquí debajo una página del libro para que os animéis. De verdad, es un libro extraordinario.






En mi casa
MONÓLOGO


     Mi casa y mis cosas me han acompañado por muchos años, cada una de ellas tiene historias importantes que contar; ellas y yo estamos llenos de recuerdos, de tristezas y de alegrías; aunque para los demás, incluyendo a mis hijos, nuestras cosas carecen de valor...
     Hay muchas personas que ven a los ancianos como si fueran algo inservible, cosas que ya no son útiles, no tienen sitio apropiado para colocarlos, estorban en cualquier parte de la casa.
     Somos solamente cosas y terminan trayéndonos al trastero, eso son las residencias; piensan que aquí se pueden guardar a los ancianos hasta que se mueran.

Raúl Morales Góngora autor del libro
LA MANSIÓN DE LOS ÁNGELES





Alma y ciencia

Todo cambia y se transforma:
Ideas y palabras,
En filosofía y poesía.
Fe, alquimia
En religión y química.
Números y átomos
En álgebra y física.


Alma y ciencia
Se unen en la Naturaleza,
Mundos visibles e invisibles,
De ondas electromagnéticas
Fuerzas, átomos, energías,
Todo cambia y se transforma.

Unión del cosmos y de lo terrenal,
Unión de energías
De fuerzas y sabiduría.
El alma aporta
Intuición e imaginación,
La ciencia aporta
Comprensión y conocimiento.

Somos hijos del cosmos
Creados con sabiduría y amor,
Somos hijos de la Tierra
Creados por fuerzas y energías,
Somos alma y cuerpo,
Somos hijos del infinito universo.

                              (Imagen de la red)

Momentos

       Instantes que afloran como un suspiro. Momentos en los que se detiene el tiempo…, cuántas cosas pasan en nuestro cuerpo.

     Sentimos emociones, se cruzan pensamientos, salen palabras y ejecutamos acciones… Millones de instantes componen una vida, pero solo unos cuantos momentos reavivan el fuego del recuerdo.
       Momentos agrios, momentos dulces, momentos agridulces..., y al final de nuestro momento, el tiempo se detiene para devolvernos unos instantes transformados en lejanos recuerdos. Nuestras vidas son momentos, instantes efímeros y eternos.
     Solo en el ahora existen esos instantes compuestos de fracciones de segundos  que nos impulsan a amar, a sentir y a vivir. El tiempo pasa pero siempre queda impreso en esa huella del ahora que es la creadora del momento.

                                                     (Imagen de la red)

Viaje a través del tiempo


Almas que vienen y van,
Como el vaivén de las olas,
Atravesando ese puente de colores
Que une las estrellas con la Madre Tierra,
Distintos colores, que nos llevan por
Distintos caminos, culturas y experiencias.

Almas que vienen y van
Como el vaivén de las olas,
Madre Tierra las acoge
Y les ofrece flores y bosques
Llenos de belleza, olores y colores;
Mares que unen orillas
Donde encuentran a sus familias,
Y se preparan para diferentes pruebas.
Experiencias de días dorados,  
Experiencias de  noches oscuras,
Aunque siempre, iluminadas
Por las estrellas y la luna.


Almas que vienen y van
Como el vaivén de las olas,
Historias que nacen y mueren
En los caminos terrestres,
Almas que han dejado
En la tierra sus  memorias.

Almas que vienen y van

Como el vaivén de las olas.

Unos gramos de imaginación creadora


... de la Red
             Hay imposibles que constatamos en la eventualidad de cada día, como por ejemplo: que no tenemos alas y por eso, por propia naturaleza, no podemos volar; o respirar en el interior del agua, como los peces, pues nuestros pulmones no está adaptados para esa función. Sin embargo, el ser humano cuenta con un instrumento que supera y suple con creces todo eso: la imaginación. Primero comienza por representar el hecho en su cabeza: "quisiera sentirme como un pájaro o soy como un pez"; luego lo inventa y crea como por arte de magia, sacando de su chistera, naturalmente después de un largo y arduo proceso creativo, el avión o el barco, por atenernos a los ejemplos expuestos.
            ¿Qué extraño artilugio es éste, que nos eleva sobre nuestra propia naturaleza y nos hace ser lo que no somos? Maravilla de las maravillas hasta cierto punto, y terrible algunas otras veces, para el resto de los impotentes seres que cohabitan con los humanos, incluidos muchas veces nosotros mismos. No siempre las creaciones de la imaginación se orientan por buen camino, ya que la mente humana funciona subrepticiamente de manera claramente bipolar: bueno/malo; amor/odio, etc, etc... La energía creadora es posible que sea neutral en sí misma, no así las intenciones de quien la manipula: en este caso el ser humano "creador".
            La sustancia de la imaginación -me gusta emplear este término meta-físico porque creo que apunta certeramente hacia su posible misterio- nos hace volar como los pájaros, pero por un aire absolutamente virtual, bello y peligroso a la vez, pues pienso que en esos instantes de tensión somos idénticos a un trapecista que se juega la vida ante un público expectante que observa al artista ofrecerse al vacío sin ninguna red bajo él que lo proteja; podríamos decir que se encuentra sin duda a merced del azaroso e indescifrable destino. Tenemos la limitada capacidad de ver sólo una parte del futuro inmediato que se nos ofrece ante nuestro ojos, pero nuestra mirada es la propia de un enfermo corto de vista. ¿Qué maquinaria secreta, por tanto, marca la puesta en escena de nuestros ingeniosa creatividad? Nadie parece haber detrás del ser humano que crea, pero eso es sólo una ficción de ficciones que humilde e incautamente nos contamos a nosotros mismos para hacer coherente nuestra íntima realidad. ¡Vaya lío maldito éste del quehacer existencial!
            Si nuestra relación es específicamente con la materia, sujeta las más de las veces a leyes estrictamente mecánicas y lógicas, ya hemos expuesto mínimamente lo que sucede; si por el contrario, se trata de una conjunción mucho más encriptada, la que establecemos con nuestras irracionalidades sentimentales, reaccionamos igualmente creando un mundo artificial y en paralelo. No tenemos remedio, o ese es el único del que disponemos para darle sentido a quienes somos. Podemos odiar o amar, envenenarnos con los celos y la envidia, crecernos con el orgullo y la soberbia o apaciguar nuestro corazón con el amor y la compasión, entregándonos a los demás. Siempre se trata de construcciones ideológicas y sentimentales prodigio de nuestra ambivalente imaginación creadora. ¿Por qué si no se retuercen tantas veces nuestro humores corporales y nos damos de bruces contra nosotros mismo y a la postre con nuestro prójimo? La balanza es tan delicada, tan sutil y lábil, que cualquier inesperado sobresalto puede desviarla en uno u otro sentido.
            ¡Ah, la imaginación creadora! ¿De qué profundo y recóndito lugar procederá?
            Somos un complejo armazón nervioso que reverbera constantemente consigo mismo, neuronalmente hablando en oleadas sincrónicas que recorren todo nuestro cortex cerebral organizado por la zona prefrontal en un bucle recurrente -según afirma Joaquin Fuster, uno de nuestros más reconocidos neurocientíficos- por medio del cual éste hace las veces de director de orquesta; aunque es obvio decir que son muchísimos los componentes de la misma, modulados en un constante baile algorítmico de "abajo hacia arriba y de arriba hacia abajo": ese flujo trepidante es quien genera nuestra consciencia. Pero además hay en el lóbulo frontal un modulo, denominado por el neurólogo Michel Gazzaniga como "El Intérprete", y ese parece ser el encargado de contarnos una historia siempre coherente con lo que a cada paso nos sucede, dando visos de verosimilitud a nuestra particular realidad: ese relato ajusta todo los desajustes posibles consiguiendo dar sentido paso a paso a nuestra existencia.
            De modo, que somos enormemente emotivos y racionales a la vez, y tenemos una especial cualidad para engañarnos astutamente; para ello nos sirve perfectamente el lenguaje (el diálogo interior) que fantasea todo cuanto puede y "Juega a contar mentiras... tralará". Pensamiento y Lenguaje, Memoria e Imaginación: "todos al poder y por el poder creador". Y así se escribe nuestra historia personal, muchas veces a espaldas de la grandilocuente Voluntad, que no sabemos muy bien donde reside: tal vez en cada una de los componentes de esa orquesta, en todos y en ninguno a la vez.
            Nos erigimos, sin saber muy bien por qué, en re-creadores del Universo que habitamos y además en co-autores de un extenso relato inter-generacional: la Historia de nuestra especie humana. Y todo ello sucede merced a nuestra compleja capacidad cognitiva, que sirviéndose de la imaginación creadora se dobla sobre sí misma e inventa constantemente realidades que no existen en la propia Naturaleza. Sin embargo, un gran peligro acecha en todo ello, ya lo hemos apuntado antes. No hay certezas definitivas en esta rápida revolución científico-tecnológica en la que estamos inmersos; no creo que nuestro cerebro tenga un plan prefijado para evolucionar en un sentido positivo, ya que la propia Historia de la Humanidad nos lo ha hecho ver en más de una ocasión: lo mismo puede haber una evolución que una involución. Necesitamos que nuestra Imaginación creadora (la de toda la especie en sincronía) encuentre el camino y se apreste a elevar culturalmente el edificio de una Ética Universal capaz de hacer posible un Mundo más justo y humano. Es una prerrogativa ilusionante y posible para nuestra joven especie dominante en el planeta Tierra. Nos lo tenemos que creer e imaginarlo minuciosamente hasta elaborar un relato que interpretemos como posible, al fin y al cabo es lo que no deja de hacer ese "Interprete" de la consciencia del que ya hemos hablado: volver coherente, en este caso, una historia definitiva de paz y concordia a escala planetaria.
            Creo que la posibilidad existe y se encuentra, hoy por hoy, con el desarrollo de la consciencia social logrado por el homo sapiens sapiens, al alcance de nuestras manos. Sólo cabe decir que nos corresponde a todos, aportando cada cual su pequeño granito de arena, conducir a buen puerto esta nave que carga en sus bodegas un ideario que es bueno en sí mismo, independientemente de cuál sea nuestro credo, bandera o color de piel.

 

Las víctimas hablan de Renacimiento

       Personas con toda una vida por delante, personas como tú y yo, que un día decidieron hacer un viaje, caminar por puentes, comprar en mercados, orar en iglesias o mezquitas, tomar un café o ir a bailar…; personas que han sido presas de la violencia de sus parejas; personas que han alzado su voz por la libertad y el respeto, por el derecho a vivir; personas que han huido de la sequía y del hambre, de las violaciones o de la esclavitud… Miles de personas que son simientes de la tierra y otras, son alimentos de los peces… Todas ellas víctimas de la violencia generada por otros seres humanos.
       Todas estas vidas truncadas, que ahora caminan por los caminos etéreos deben ser recordadas y su marcha no puede ser olvidada. Tenemos que ser conscientes del dolor y del daño que sufren sus familiares y amigos extendiéndose a toda la Humanidad. Las víctimas de la violencia piden desde su nuevo universo que de una vez por todas, aprendamos que la violencia solo engendra violencia, que cualquier conflicto debe solucionarse con un diálogo sincero y comprometido. No podemos seguir hablando con palabras vacías e ignorando las consecuencias.  
       Vivimos en un mundo conmocionado, guerras frías y calientes por doquier, miles de familias destrozadas por una violencia gratuita que no lleva a nada, solo al caos y que solo favorece a unos cuantos. La humanidad está dividida, asustada y temerosa, no sabe a quién creer y no confía en nadie.
      Época sombría que nos hace recordar un pasado de ignorancia y de crueldad que creíamos erradicado. Personas con ansías de paz y libertad lucharon para crear un nuevo saber y conocimiento, así surgió el renacimiento.  
       El nuevo renacimiento se está construyendo con andamiajes invisibles, al ritmo de cada amanecer en cada país del mundo, pequeño o grande, -que como el éter aunque no se vea o se huela, existe-, porque la gran mayoría de los seres humanos tenemos sed de paz y libertad.
     
  El renacimiento surge como rechazo a la sombra. El renacimiento es una fuerza basada en la unidad y conlleva entusiasmo y ganas de luchar por la paz, por la sabiduría, por una nueva forma de vida basada en la libertad, en el respeto y en la dignidad de cada ser humano. El renacimiento es la fortaleza frente a la debilidad y tibieza de los que gritan, amenazan e imponen sus leyes con látigos y bombas. El renacimiento es sabiduría y se opone a los egos enfermos y desmesurados porque esos  egos son debilidad e ignorancia, los egos creen que  saben pero en realidad, no saben nada.
       Como dijo Lavoissier: “Nada se crea, todo se transforma”, todo lo que los seres vivos de este planeta hacemos o dejemos de hacer se queda en esta esfera que llamamos planeta, y todos, ricos o pobres, blancos o negros…, musulmanes, judíos o cristianos,… vamos a sufrir las consecuencias de este terrible desequilibrio terrestre. No se puede dar prioridad al dinero antes que a la vida humana o a la Naturaleza.
       Armas, violencia, hambre, sed, terrorismo, esclavitud son las herramientas necesarias para crear guerras, conflictos, destrucción. Estamos a las puertas del renacimiento, el  periodo sombrío toca a su fin porque la gran parte de la Humanidad así lo desea, los seres humanos deseamos vivir en paz y ver a nuestros hijos crecer, y a los hijos de nuestros hijos.
       Palabras de reconocimiento para  todas las personas que han dado su vida, para todas las personas que luchan por la libertad, la democracia, el bienestar de la Humanidad, palabras de gratitud para todos los seres humanos que con su actitud edifican los andamiajes del nuevo renacimiento.
       Nuestra actitud es nuestra diferencia, la vida es valiosa y sagrada, el futuro de la Humanidad está en nuestras manos, en la de todos nosotros.

(Imagen de la red)

Amor imposible

...de la Red

Amor imposible 

  

      La mesa del lujoso comedor rebosaba de regalos de boda. Valentina sostenía en las manos un paquete que no quiso dejar con los demás y prefirió abrirlo en la intimidad. Era una caja de música. Al levantar la tapa, los ritmos de un tango avivaron el deseo y la nostalgia de aquellas tórridas noches de escapada junto al río. Al compás de la música de los arrabales, una pareja de porcelana giraba plasmando la sensualidad de la quebrada de cintura de la mujer bajo el cuerpo del hombre. Al lado, una nota de despedida. Esa tarde, unas campanas repicaron a boda y otras a sepelio. 


                                                                                                                                                    Lana Pradera

Microcosmos poético


... de la Red
 

              Ningún océano, por grande que sea, puede contener apenas una parte de todo cuanto en mi alma cabe.
          ¿De qué estamos hechos que nos sentimos inconmensurables?
            Cuando me miro hacía dentro veo que puedo alcanzar con sólo pensarlo todo cuanto deseo. Mi imaginación se multiplica y acrecienta tanto que soy capaz de presentir que me conecto con todas las otras mentes y cuerpos que me circundan a distancia. Y gracias a esta extraña y oculta fuerza me experimento tan extenso como el mayor de los universos posibles.
            Sin embargo... cuando observo mi cuerpo: ¡me veo tan insignificante frente al macrocosmos que me alberga!
            Tal vez, sólo tal vez --me digo a mí mismo--, la causa de esa energía no resida directamente en mi cuerpo, sino que provenga de mucho más lejos, de ese cálido fuego interior que pareciera darle vida y razón de ser al espejismo que soy.

 
 

La senda


(imagen de la autora, Monti)

          Pedradas a pedradas,

          a dentelladas tragar camino,

          con denuedo seguir la senda,

          que no ha de llegar,

          llega, no, a ningún sitio.

          Sola, en mi soledad más sola,

          refugiada en mi misma,

          sin encontrar cobijo.

          La gente no entiende

          ni quiere entender, nada,

          hermética mente cerrada.

          No hay túnel que lleve

          a una luz, no lo habrá,

          seguir a dentelladas,

         
la senda, a ningún lugar.

Los dioses


... de la Red

      -- ¿Dónde guardas tus dioses, amigo? -- le preguntó--.
     -- En el fondo de mi bolsillo o en el de mi corazón: da lo mismo --le respondió--. Y añadió: Todos tus dioses pueden reconocerse en uno sólo: tú mismo. Tú los creas a tu imagen y semejanza. ¿No te causa extrañeza que todos ellos se parezcan tanto a ti?
     -- ¡Ah...! Buena respuesta --el interpelante parecía sentirse aliviado--. Me aclaras el porqué de que tales dioses me hayan parecido siempre tan humanos, tan llenos como yo de las mismas e insufribles contradicciones lógicas.



PRESENTACIÓN DE LIBROS



     El pasado martes 6 de Junio de 2017, con un éxito rotundo de ventas y público, se presentó en el Salón de Actos de la Casa de Castilla-La Mancha en Madrid, el nuevo programa editorial de Escritores en Red, y con él los libros que inician la andadura de la nueva colección de poesía y narrativa de nuestra asociación bajo el Sello Editorial de Liber Factory. 



A saber:

RIMAS PARA SUPERVIVIENTES
de Gio Aguiló


y
101 COOKIES
(memorias de un pastelero)
de Santiago Solano


       Muchas gracias por vuestra masiva asistencia y vuestro apoyo incondicional.

¡ESTAMOS REALMENTE CONMOVIDOS!


       Este año, con estos libros, no hemos estado en la Feria del Libro de Madrid, pero algunos autores hemos vendido más fuera que dentro del Mercado Librero. ¡Je,Je,Je!



Estoy feliz, mira tú, muy feliz.





























































































































































En este mundo traidor
nada es verdad ni mentira
todo es según el color
del cristal con que se mira.

Ramón de Campoamor









El despertar

... de La Red
       Experiencias, momentos e incluso vidas enteras de ascetismo o desenfreno, de riqueza o pobreza, no nos llenan y sentimos un vacío que nada puede llenarlo, es el vacío del alma.
       Vidas que como una noria va subiendo y bajando, a veces al cielo y otras a ras de suelo. Vidas de fachadas materiales o profesionales, fachadas vacías y deterioradas, y cuando la fachada se cae, sentimos un vacío que no comprendemos.        Vivimos mirando al frente a través de nuestros ojos físicos y muchas veces no sabemos lo que hacemos ni porqué lo hacemos, ni siquiera comprendemos nuestras acciones ni situaciones.
       Sentimos un vacío que no sabemos identificar, vacío que proviene de la voz de nuestra alma que nos susurra que debemos despertar.
       Cuando la vida nos pone delante de otro cruce de caminos, sentimos que todo nuestro pasado es historia, que el tiempo ha pasado a una velocidad vertiginosa y, muchas veces, sentimos que no hemos hecho nada, que hemos malgastado nuestro tiempo.
       Nuestras vidas nos aportan experiencias y debemos aprender a valorarlas para despertar y no volver a olvidar a nuestra alma.
       Despertar confiado y sereno que nos lleva hacia donde debemos ir, escuchando los susurros del alma y sabiendo que aunque nuestra existencia es efímera está llena, que el tiempo pasa pero lo llevamos dentro a través de nuestras experiencias.
Despertar al alma, despertar a la conciencia, despertar a la felicidad, paso a paso, oyendo que las prisas son traicioneras, paso a paso, para ir dejando nuestra huella.

Estatua de bronce


... de la Red

Jardín del Paraíso
donde los negros
nudos de la noche
se estancan como mantras
a punto de estallar
entre mis manos

Soy una quieta
estatua de bronce
que escupe sangre
desde su pulmón verde

Mientras tanto
veo mariposas submarinas
que han elegido
nadar en vez de volar
soplan
sobre la superficie del Mar
y nace el Viento

Más tarde voy
y las espanto
rompo el Mundo
con mi vómito verde
vuelvo a escupir sangre
y me disuelvo...

¿Quién
podrá
--me he interrogado
muchas veces--
explicarme
este Sueño?

El compositor

... de La Red



          El compositor canta, juega y crea
          con las cuerdas del universo,
          blues, jazz, óperas o zarzuelas.


          La partitura está terminada
          y lista para ser interpretada.
          El telón sube
          y un escenario de
          auroras boreales
          danzan al son de los aires.


          El compositor ha creado
          con las notas del agua, el arpa,
          con las notas del cielo, el piano,
          con las notas de la lluvia, el violín,
          con las notas del viento, la trompeta,
          con las notas de la tierra, el tambor…


          La orquesta arranca sonidos
          de baladas, de rock, de souls,
          de jazz, de quimeras, de leyendas,
          aires de libertad y belleza,
          que nos hacen vibrar
          en lo más profundo del alma.
          El compositor ha creado
          su obra Maestra.

... de La Red

La piedra y yo


... de la Red

                        Si lanzo una piedra al aire
                        ¿Hacia dónde irá?
                        -me pregunto-.

                        Una piedra mental,
                        naturalmente,
                        impulsada hacia un lugar
                        que, en el fondo,
                        desconozco;
                        pues la piedra y yo somos
                        en esencia una misma cosa;
                        estamos sumergidos los dos
                        en esa sutil sustancia
                        donde toda la materia se diluye...

                        para tornarse en invisible aire
                        que es como decir: nada.

                       Algo que al respirar nos da la vida,
                       aunque no tenga función aparente
                       que podamos adivinar.

                       Pero la piedra es, sin duda,
                       toda una evidencia.
                       Y yo soy
                       al mismo tiempo, junto a ella,
                       prácticamente indistinguible,
                       sólo si no me abstraigo,
                       que es como reconocerme sin más
                       de una manera distinta.

                       La piedra y yo;
                       yo y la piedra,
                       meros artefactos mentales
                       navegando por un extraño espacio,
                       donde toda la materia se diluye...

                       para tornarse en invisible aire
                       que es como decir: nada.





A Federico García Lorca y España

... de La Red
Domo de la luna nueva
está amparando tu nombre,
García Lorca…Federico;
estandarte victorioso,
cristo de la poesía flameando por las 
                                            [edades
en una cruz de fusiles.
De fojas cero a no sé cuántas
se ha levantado tu selva;
savia perenne, alta fronda, de raíz antipodal;
turba suculenta.
Qué de palabras
en cada pliego sin otoños.
Árboles sabios producen dorada altura,
mas el oro inmarcesible
es tu sudario hasta siempre…
…ningún erudito dice,
tampoco algún Diccionario
hasta cuando dura  “siempre”…
¡Ah, pero tú  trasciendes todo;
por poros, por intersticios, por trizaduras,
entre las formas caprichosas de las nubes,
por espontáneos manantiales
que producen los espasmos de la Tierra,FEDERICO GARCÍA LORCA Y ESPAÑA.



Rodolfo Herrera Tapia
autor del poema






Elegía a la muerte de mi hermano

Foto de familia
Andrés de Torres Ramos




La muerte entró en la casa y se llevó al más joven
de los hermanos. Vino del brazo del sigilo,
con pústulas de llanto
sobre el badil del tiempo. Traspasaba la carne
con lúgubres agujas de no ser y quietud.
Sonaba el adelanto
de una música infausta que había estado dormida.
Doce golpes después la viña se anegó.
La nube soltó un grito
de cenizas heladas. Sobre el corazón terso
de una tribu compacta se abalanzaba presta
la voz del infinito.


Ya no alumbran la fragua los destellos del mazo,
ya el metal no se dobla ni el yunque nos aguanta
los golpes del destino.
Ya apenas se percibe la viril honradez
de tu surco, valiente labrador de la tierra,
solo ahora en tu camino.
Ya a la bodega nadie baja, y las gallinas
tienen ojos de perro apaleado, no ponen
siquiera ni a deshora.
Y es que ocurre que todo se detiene y se ajusta
al ritmo de tu tumba, Andrés de Torres Ramos.
¡¿Quién tu aliento atesora?!


Hay en la mesa un sitio vacío, y un silencio
de arboleda sin pájaros. El recuerdo levanta
oleadas de tu vida
y las va acomodando aquí y allá sin ton
ni son. Aquellas cosas que sólo tú hacías
indican la salida
para acercarnos a ti: bajar a por el pan,
rellenar la botella del vino ácimo. Contra
tu ida me solivianto.
La muerte entró en la casa y se llevó al más joven
de los muchachos. Vino del brazo del sigilo,
con pústulas de llanto.


Alfiler

... de La Red
La madre aseguraba
que Medea su hija poseía 
poderes sobrenaturales,
pero nunca se pudo comprobar.

El infiel
marido de Medea se fugó
con su mejor amiga.
Sin verter una lágrima, 
la esposa despechada
se limitó a fabricar
un muñeco de trapo
al que clavó un alfiler.

El tren expreso
con destino Paris descarriló. 
Se contabilizaron
cerca de cien personas 
entre muertos y heridos.

Al conocer Medea
la horrible noticia 
reflexionó sin inmutarse:

Yo no buscaba esto,
debo tener cuidado en el futuro 
y no clavar el alfiler
de forma tan profunda.




... de "Mis personajes se pasean por La Red", 
Tomo II, Colección Claves Líricas, 
2012